Fernando Vázquez ha sido destituido como entrenador del primer equipo del Deportivo de La Coruña, actualmente en Segunda División B, según ha confirmado este lunes el club blanquiazul.

"El Consejo de Administración del Real Club Deportivo ha comunicado hace unos minutos a su técnico, Fernando Vázquez, que no continuará dirigiendo al equipo, rescindiendo de este modo el contrato que vincula a ambas partes. Junto al entrenador de Castrofeito tampoco continuará en el club su cuerpo técnico", anunció la entidad gallega.

La derrota del pasado fin de semana ante el Zamora (1-0), que dejó a los deportivistas segundos a cinco puntos de Unionistas, líder del Grupo 1A de Segunda B, precipitó el despido de Vázquez, que cierra así su segunda aventura al frente del banquillo coruñés.

En su primera etapa, el de Castrofeito cogió al equipo a mitad de la temporada 2012-13 y no pudo evitar el descenso, pero el siguiente curso lo devolvió a Primera. Tras su marcha en 2014, regresó a A Coruña en diciembre de 2019 con el objetivo de evitar una nueva caída del club, esta vez a Segunda B, algo que finalmente no consiguió impedir en un final polémico por el partido aplazado ante el Fuenlabrada por los casos positivos de coronavirus.

"El Consejo de Administración quiere agradecer sinceramente a Fernando y su equipo el duro trabajo desarrollado en esta segunda etapa al frente del equipo tras haber aceptado el reto mayúsculo hace un año de tratar de salvar la situación deportiva en la que se encontraba la institución y haberlo hecho anteponiendo en todo momento la ilusión, la motivación y la unión de todo el deportivismo frente a las dificultades que se fueron sucediendo", señaló el comunicado.

De la Barrera, favorito

Poco han tardado en surgir los primeros nombres candidatos a rellenar el hueco que deja Vázquez en el banquillo de Riazor, pero es uno de ellos el que suena con más fuerza. Concretamente, el de Rubén de la Barrera, técnico joven cuya gran hazaña fue el ascenso de la Cultural y Leonesa en 2017 y que se caracteriza por desarrollar un fútbol combinativo y alegre.